1990-2000 / Realismos obreros y populares contemporáneos
Título: La mujer en el arte
Fecha: 8 de marzo, 1991
Lugar: Museo Nacional de Bellas Artes, Santiago
Participantes: Gracia Barrios, Concepción Balmes Barrios
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Catálogo de la exposición Mujeres en el arte, organizada por el Servicio Nacional de la Mujer (SERNAM) y el Ministerio de Educación de Chile (MINEDUC), y realizada en el Museo Nacional de Bellas Artes de Santiago del 8 al 28 de marzo de 1991. Participaron de esta exposición las pintoras Gracia Barrios y Concepción Balmes Barrios, en un grupo que integró 140 mujeres artistas, entre ellas Patricia Velasco, Mireya Larenas, Lily Garafulic, Ximena Cristi, Delia del Carril, Roser Bru y Lotty Rosenfeld. El catálogo cuenta con un prólogo del artista Nemesio Antúnez, director del MNBA, y un epílogo de María Soledad Alvear, Ministra Directora del SERNAM.
1990-2000 / Realismos obreros y populares contemporáneos
Título: Balmes. Pinturas – Dibujos – Gráfica 1944-1994
Fecha; marzo a mayo, 1989
Lugares: Museo Nacional de Bellas Artes y Galería Tomás Andreu, Santiago, Chile
Participantes: José Balmes
Una de las dos grandes exposiciones retrospectivas de la obra de José Balmes realizadas en el Museo Nacional de Bellas Artes de Santiago en 1995, en esta ocasión con el apoyo de la Galería Tomás Andreu. Al igual que Mirada Pública (1984) y Balmes. En Tierra (1989), este evento se realizó de manera simultánea en ambas sedes organizadoras, relevando diferentes aspectos históricos en los cincuenta años de trayectoria del artista. En el catálogo, editado con gran sofisticación, destacan los escritos de Milan Ivelic, director del Museo Nacional de Bellas Artes, y del crítico de arte Justo Mellado.
1990-2000 / Realismos obreros y populares contemporáneos
Título: Gracia Barrios. Ser Sur 1949-1995
Fecha: octubre a noviembre, 1995
Lugar: Museo Nacional de Bellas Artes, Santiago
Participantes: Gracia Barrios
Gran exposición antológica de la pintora Gracia Barrios en el Museo Nacional de Bellas Artes de Santiago. Su organización, que revisa la trayectoria completa de la artista entre los años cuarenta y noventa, se divide en cinco partes: los antecedentes de una formación (1945-1954), la economía del signo (1954-1962), el realismo crítico (1963) ) ) -1973), la figuración narrativa (1974-1987) y la poética de la materia (1984-1995). De este evento se resguardan el catálogo abreviado y la publicación in extenso, editada por CONARTE, que incluye exhaustivos ensayos de la periodista Faride Zerán y el crítico de arte Justo Mellado en torno a la vida y obra de Barrios.En el catálogo abreviado destacan los escritos introductorios de Milan Ivelic, director del Museo Nacional de Bellas Artes, y Ricardo Lagos Escobar, presidente de Chile.
Cita al catálogo breve:
La infancia de esta artista, puede decirse, se desenvolvió en un ámbito privilegiado. Su padre, Eduardo Barrios, gran creador literario y premio nacional, convocó entorno a su hogar a una pléyade de artistas e intelectuales más destacados de esos tiempos. Eso permitió que Gracia avanzara sin tropiezos en su vocación artística.
No es sino, en los años 68, el período de la reforma universitaria y de las propuestas de cambios estructurales para Chile, que inicié mi amistad con esta gran artista. Son años de cambios y convulsiones internacionales de gran impacto como la guerra de Vietnam y la muerte del Che Guevara que tan hondamente caló en el espíritu de los intelectuales latinoamericanos.La pintura de Gracia recoge esos acontecimientos y los instala persistentemente en sus telas, en esta relación del hombre con la tierra y de cómo ésta se ve sacudida, alterada o conciliada.
El 11 de septiembre de 1973 para la pareja de pintores Balmes-Barrios, como para miles de chilenos, fue el inicio de un período de trágicos acontecimientos que los marcará profundamente. El siguiente exilio en París, se traduce en lejanías y ausencias donde su pintura resulta más plasmando de una forma fugaz una suma de situaciones humanas llegan siempre por noticias o relatos de terceros.
Una década fuera de su tierra no terminó su fuerza y creatividad, su persistencia en el “retorno a sus orígenes”, que deja plasmada entre otras obras, en ese cuadro imborrable con la Estación de Leyda. Se refuerza el carácter femenino y de mayor intimidad que caracteriza su creación plástica de los 90. El reencuentro familiar, los paisajes de la tierra, la gente, todo aquello que es tan preciado por quienes sufrieron el desarraigo.
Su sensibilidad la compromete con la búsqueda de un camino para recuperar la democracia en nuestro país y en sus pinturas reproduce escenas de la lucha por recuperar la libertad.Ricardo Lagos Escobar
Citas al catálogo extenso:
En el exilio me di cuenta de que era demasiado chilena, asumo que soy absolutamente latinoamericana y que me hacen falta los rostros y los colores que busco desesperadamente en las librerías francesas recorridas a diario para hojear en las revistas, libros, o en las fotografías cualquier cosa que me devuelva los rostros y colores que se me han ido… No me gusta hablar de ese tiempo en que dejó mi corazón como guardado en la pausa más difícil de mi vida, tanto personal como artística.
Afuera pintaba, pintaba mucho, pero estaba como lejana.Al principio hago una pintura muy política, muy narrativa porque pintó lo que había sido el golpe militar y para ello nos ayudaron las fotografías y documentos que salían clandestinamente de Chile y la reconstrucción de la realidad que caca uno hacía con su memoria, entonces me pongo objetiva, más anecdótica, incluso formalmente. Esos son los primeros tres o cuatro años de exilio, pero después nació mi nieta Elisa y más tarde la Conchita se traslada con ella de Bulgaria a París, y entonces pienso que hay que tratar de humanizarse, que no puede ser todo lo mismo, y del negro, blanco o rojo intento otros colores. Pero me falta Chile, no lo tengo en mis ojos y empiezo a comprometerme en los temas internacionales como la bomba atómica, las bombas de racimo,todo esto dibujado o pintado en la mesa de la cocina donde todos comíamos, siempre apurada para levantar las cosas, sacudir el mantel y ponerlo sobre la mesa… No me alcanzo a concentrar bien, es una pintura que la siento débil. Me falta el aire, la cordillera, el modelo… Me subo a los buses buscándolos, pero no están. A la vez pinto con sentimientos, como aquella serie que retrata a una niña de ojos grandes, oscuros que las he visto en los documentales que han hecho los alemanes sobre las prisioneras políticas en Chile. Muchas de ellas son de la edad de la Conchita, sí que han sido torturadas y violadas.Intento un homenaje a las jovencitas inocentes, como lo ha hecho Goya… Pinto, pinto deseseradamente, participamos con Balmes en todos los actos de solidaridad con Chile, hago murales, afiches. Balmes es nombrado profesor en la Sorbona, yo pinto y pinto, viajo a Bulgaria, expongo allí mientras acompaño a mi hija que va a dar a luz. Después tengo que regresar en tren en una escena que me resulta tenebrosa… Tenemos con Balmes un taller en La Ruche donde seguimos trabajando arduamente pero estoy pendiente de lo que sucede en Chile, de hablar con los que viajan, con quienes nos traen noticias, y de pronto se puede volver, pero no todos.Gracia Barrios en entrevista a Zerán
Apenas pisa de nuevo las calles de su ciudad, Gracia Barrios vuelve a recuperar la materia, y sus pasos rápidos para recapturar el tiempo perdido la conducen a la Vega, a los mercados al aire libre en los que busca desesperadamente clavar su mirada en ojos que se limita en ella para devolverle el agua, la luz, los colores, la sombra.
No podía dejar de pintar la cordillera, se subía a las micros para captar en sus ángulos interiores diferentes que los llevaban a la tela. Pinta cordilleras, micros, vendedores ambulantes, paisaje y todo lo que le resulta chileno hasta que empieza a tener conflictos con la técnica, y entonces pone pintura más gruesa.
Gracia Barrios se siente viva, y si bien mantiene paralelamente una temática que alude a la situación política del momento, como las protestas contra el régimen que se inician el año 82, finalmente ha vuelto a su esencia.Faride Zerán
La obra de exilio vive amenazada por las condiciones de certificación de la obra. Doble castigo político: obligado a abandonar su tierra natal, es obligado a vivir el temor del exilio de la obra pictórica. Doble combate: lucha por el regreso al país y lucha por la persistencia de la obra. Ambas luchas no son simétricas, porque la dictadura no vence sobre la obra, sólo lo hace temporalmente sobre la lógica de los desplazamientos prácticos. Si hay regreso al país, es porque en la obra la lucha contra el exilio estaba ganada desde la partida. En las obras de hoy esta cuestión se verifica como excesiva. De algún modo, el dibujo en Gracia Barrios, siempre, inscribió la clave de dicho exceso
Justo Pastor Mellado
El retrato se produce cuando la cabeza deja de formar parte del cuerpo y se reconoce, sobrecodificada, perdura la distinción de la facialidad que constituye el retrato… La cabeza está en el cuerpo, pero no el rostro. El rostro es una superficie: trazos, líneas, arrugas de la cara, cara larga, cuadrada, triangular, el rostro es un mapa, incluso si se aplica y se envuelve sobre un volumen; incluso si lo rodea y bordea sus cavidades que no existen sino como orificios. Aún humana, la cabeza no es aún un rostro….
El rostro no es humano ni animal. Incluso es hasta inhumano, ya que por naturaleza el rostro es, siempre, un primer plano con sus superficies blancas inanimadas, sus orificios negros brillantes, su vacío y su aburrimiento.Lo que hace Gracia Barrios es escapar al rostro enfatizando el rastro, deshaciendo las “rostrocidades” para hacerlo clandestino, casi asignificante. Pero inmediatamente, busca imprimir en esa superficie plana una identificación, una similitud agobiante. Esto significa que hay en su obra una doble condición de la facialidad, alternando entre la borradura de la significación y una sobredeterminación de sus rasgos.Justo Pastor Mellado
1990-2000 / Realismos obreros y populares contemporáneos
Título: Arte contra el Apartheid. 78 artistas en los años 80
Fecha; 13 de septiembre al 1 de octubre, 1995
Lugar: National Gallery of Zimbabwe
Participantes: José Balmes y otros
Catálogo que consigna la participación de José Balmes en la exposición internacional de arte contemporáneo Art Against Apartheid. 78 artistas en los años 80 , organizados por la Association Française d’Action Artistique (AFAA) y las Naciones Unidas bajo el patronato de Jacques Chirac y Nelson Mandela, presidentes de Francia y Sudáfrica respectivamente. Esta exposición se llevó a cabo en la National Gallery of Zimbabwe a modo de homenaje a la creación de la Asociación “Artistas del Mundo contra el Apartheid” en 1983 por parte de los artistas Antonio Saura y Ernest Pignon-Ernest, e incluida en su catálogo el ensayo breve Signaux Lumineux del filósofo francés Jaques Derrida.Esta exhibición integró obras de artistas y escritores de todo el mundo convocados por esta agrupación, como Pierre Soulages y Christian Boltanski (Francia), Julio Cortázar y Julio Le Parc (Argentina), Carlos Cruz-Diez y Jesús Rafael Soto (Venezuela), Max Bill (Suiza), Roberto Matta (Chile), José Luis Cuevas (México), Sol LeWitt y Claes Oldenburg (Estados Unidos), Wifredo Lam (Cuba), Wolf Vostell (Alemania), Allen Ginsberg y Jorge Amado (Brasil), Richard Hamilton (Inglaterra), Rafael Canogar, Ráfols Casamada, Antoni Tàpies, Josep Guinovart y Eduardo Arroyo (España). José Balmes expone el lienzo Defense d’afficher (técnica mixta, 1982).
1990-2000 / Realismos obreros y populares contemporáneos
Título: Femenino / Plural. La mujer y las artes visuales. Cultura argentina para el tercer milenio
Fecha: 15 al 28 de marzo, 1998
Lugar: Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires, Argentina
Participantes: Gracia Barrios y otros
Tríptico que consigna la participación de la pintora Gracia Barrios en Femenino / Plural. La mujer y las artes visuales , exposición colectiva de mujeres artistas realizada en 1998 en el Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires, Argentina. Barrios participó junto a Voluspa Jarpa, Carmen Aldunate, Roser Bru y Patricia Israel de la representación de artistas chilenas en la exposición, comisariada por el filósofo Milan Ivelic, director del Museo Nacional de Bellas Artes de Santiago. Participaron de esta exhibición figuras de gran relevancia, como Remedios Varo (México), Marta Minujín, Raquel Forner, Alicia Penalba, Grete Stern y Liliana Porter (Argentina).